Centroamérica encara «retos significativos», según embajadores de EEUU en la región
Los embajadores de Estados Unidos en Centroamérica señalaron durante un conversatorio conjunto en Washington que existen «retos significativos» y desafíos en diferentes áreas para la región. Aunque existen similitudes entre los países, también destacaron marcadas diferencias.
Algunos temas claves son el estado de excepción en El Salvador, la persecución de operadores de justicia y la prensa en Guatemala, la inseguridad ciudadana en Honduras y la penetración del narcotráfico en Costa Rica, señalaron.
Los diplomáticos consideran que Centroamérica ofrece “enormes oportunidades” para el crecimiento económico, las inversiones y para afrontar en bloque problemas comunes.
El Salvador, régimen de excepción
El embajador de EEUU en El Salvador, William Duncan, dijo en el encuentro en el centro de análisis Diálogo Interamericano que hay muchas preguntas sobre hacia dónde se encamina el país.
Su trabajo prioriza mantener los lazos diplomáticos “y la gente de El Salvador aprecia eso”, dijo.
EEUU reconoce que la popularidad del presidente Nayib Bukele es alta, y que incluso los detractores del mandatario ven que la seguridad ciudadana ha mejorado, pero hay incertidumbre sobre qué sigue después del régimen de excepción que organismos internacionales siguen de cerca por informes de violaciones de derechos humanos.
Honduras, derechos humanos y migración
La embajadora de EEUU en Honduras, Laura Dogu, señaló la importancia de la diplomacia para afrontar el tema de las migraciones.
Honduras, según la embajadora, enfrenta un serio problema de migraciones irregulares hacia EEUU, con lo que gran parte de su trabajo se encamina a reforzar las vías y el plan de la administración Biden para encontrar soluciones a los problemas de raíz de las migraciones irregulares.
Honduras además sigue enfrentando “retos significativos” sobre todo en materia de seguridad, no solo por los homicidios, sino también por las extorsiones de grupos organizados y otras estructuras que suprimen los recursos de la población.
Desde la sede diplomática en Tegucigalpa se siguen muy de cerca los asuntos de «derechos humanos, educación, creación de empleo y las estrategias migratorias», dijo.
Guatemala, ataques a la independencia judicial
El embajador de EEUU en Guatemala, Willliam Popp, dijo que Guatemala, a diferencia de otros países de la región, muestra una economía «muy sólida» que plantearía una capacidad de afrontar situaciones adversas con una recuperación bastante rápida después del COVID-19.
«No sólo por las remesas, sino también como centro de atracción de inversiones», dijo Popp, quien lleva tres años en el cargo en Ciudad de Guatemala, y asegura que pese a esos avances, el país es centro de muchas preocupaciones.
«Existe mucha preocupación sobre la institucionalidad en el país y el imperio de la ley por la persecusión de jueces, fiscales independientes y la prensa, hay muchos focos de atención», dijo el embajador.
Puede interesarle: España otorga nacionalidad a la periodista Patricia Orozco
El embajador señaló «preocupaciones» de cara a las próximas elecciones el 25 de junio sobre la independencia de instancias claves para la democracia como el poder electoral, por procesos que han marcado al país en las últimas semanas como «sacar de la contienda» a algunos candidatos que gozaban de aceptación popular.
La cooperación de Guatemala con EEUU en temas como el combate al crimen organizado con extradiciones de solicitados por la justicia estadounidense ha avanzado, y en el tema migratorio también es «un aliado fuerte», dijo el embajador.
Costa Rica, la penetración del narcotráfico
La embajadora de EEUU en Costa Rica, Cynthia Telles, dijo que el país centroamericano, considerado como oásis para la democracia en la región, es una fortaleza de estabilidad en la región, pero que los problemas regionales están teniendo un «impacto importante» en la sociedad costarricense.
La penetración del narcotráfico ha generado un problema de seguridad pública y «mucha preocupación» para la sociedad, que dispone de una institucionalidad sólida, pero con un problema enorme que plantea la instalación de cárteles de la droga en el territorio, dijo Telles.
«Desafortudamente ahora está llegando mucha droga, especialmente de Colombia, que plantea problemas de inseguridad», dijo la embajadora.
Telles valoró también que en el país se ha visto un problema serio de falta de empleos que se agudizó con la pandemia.
Costa Rica está bregando con el tema migratorio a la inversa de otros países de la región, al haberse convertido en receptor de miles de nicaragüenses que se desplazan hacia ese país, pero también con los flujos de migraciones desde el sur del continente que atraviesan el país, señaló.
«Ahora el 20 % de la población de Costa Rica es inmigrante, especialmente de Nicaragua, con unos 800.000» instalados en el país, dijo la embajadora, y los números apuntan a que Costa Rica «recepciona unos 4.ooo migrantes al día» provenientes de Venezuela en su mayoría, que llegan al territorio tico desde el sur.
Belice y las rutas de la droga y los migrantes
La embajadora de Belice, Michelle Kwan, dijo que ha visto recuperarse la economía del pequeño país a tiempos prepandemia, con un flujo de turistas que ya vuelven a copar sus centros de veraneo, pero que también se ha visto impactado por el narcotráfico.
La droga que de sudamérica atraviesa la región para entrar a México y de ahí a EEUU es «un problema» con el que se vive a diario en Belice, apuntó.
Los embajadores creen que diálogos en conjunto como este encuentro permite dimensionar los aportes que puede hacer la cooperación internacional para focalizar las ayudas para la región.